Despues de tanto...

El 15 de noviembre de 2005, más de un año después de mi último post, el disco de Mamá Pulpa llegó a las tiendas.
No fue un proceso sencillo, pero el día que finalmente pude llegar a una tienda y comprarlo, cerré uno de los ciclos más importantes de mi vida.
Y salí de ahí flotando, con una sonrisa que no se me borró en varias horas.

Respiré.
Hondo.

Quiero decir, me tomó diez años de mi vida llegar a este punto.
Algunos pensarán que fue demasiado. Y quizás tienen razón.
Pero yo me siento muy orgulloso del resultado, tanto en su calidad de sonido, como el del arte.
Soy dueño de los derechos de mi disco y lo publicó Sony BMG, una de las más importantes discográficas del mundo.

No pretendo presumir. Por favor no me malentiendan.
Quizás intento justificarme, al entender que el precio que tuve que pagar por hacer las cosas exactamente como las soñé, lo pagué con años.
Con años de esfuerzo y dedicación.
De prueba y error.
De frustración y dolor.
De siempre estar a punto de aventar la tolla.
De no hacerlo.
De confiar en mí y en mis sueños.
De despertar a media noche y descubrirme lejos del objetivo.
De perder a muchos amigos queridos.
De conocer a muchos nuevos.

De aprendizaje, de experiencia, de profesionalización.

No soy ni el mejor, ni el más cabrón.

Sólo soy el mismo necio de siempre.
Feliz, por haber hecho realidad uno de los más ambiciosos sueños que tuve desde la adolescencia, y emocionado, porque aún tengo muchos sueños que cumplir.